El continuo desarrollo urbanístico, hace que las diferentes instalaciones de ocio y esparcimiento entren en competencia para diferenciarse unos de otros. En este campo, comienza el desarrollo de los pavimentos decorativos en toda su plenitud. Este afán por diferenciarse, provoca la necesidad de diferentes combinaciones artísticas que confieran al local la singularidad requerida.
Cualquier lugar es bueno para dar el toque personal al local, pudiendo dar incluso acabados flexibles y deformables dando confortabilidad al pavimento.